Consejos de jardinería

La albahaca, el cilantro y el cebollín crecen muy bien en interiores. Encuentre una ventana donde dé el sol para que sus hierbas reciban al menos cuatro horas de luz solar directa. Plante semillas o plantas pequeñas en tierra premezclada para macetas y mantenga la tierra húmeda.

Cultive numerosos tomates a partir de las semillas de un tomate reliquia maduro. Coloque las semillas en un recipiente, cubra con agua y reserve por algunos días. Enjuague las semillas muy bien eliminando todos los restos de tomate y séquelas hasta que sea momento de plantarlas.

Cultive su propia huerta pequeña para ensaladas con lechuga, rábanos y tomates. Plante semillas en macetas para ventana o recipientes de plástico reciclable, como bidones de leche o botellas de jabón para la ropa limpios sin las partes superiores.

Coloque las bases de tallos de apio, extremos de cebolletas y sobras de tallos de lechuga en recipientes poco profundos con agua al sol. Cambie el agua todos los días y trasplante a la tierra una vez que comiencen a crecer.

Junte el agua de lluvia en lugar de regar con agua de la canilla y pagar más. El agua tibia es menos traumática para las plantas y suele contener menos contaminantes porque no está tratada.

Plante plántulas en cáscaras de huevo vacías en lugar de usar recipientes de otro tipo. Las cáscaras son autocompostables, por lo que puede plantar todo una vez que salgan brotes y su planta recibirá una dosis de calcio que no le costará un centavo.

En lugar de llenar una maceta entera con tierra costosa, llene la mitad con bolitas de poliestireno reutilizadas y cubra con una tela. Su planta en maceta costará menos y será un poco más fácil de mover.

La tierra húmeda que se riega de más puede causarles enfermedades a las plantas. La canela tiene asombrosas cualidades antifúngicas que podrían ser una manera económica de mantener sus plantas saludables.

Haga su propio mantillo con hojas trituradas y recortes de pasto, y cree un compost rico en nutrientes de restos de frutas y verduras, filtros y granos de café y cáscaras de huevo trituradas.

Llene cualquier botella de vidrio reciclada con agua y colóquela boca abajo en la tierra de su planta en maceta. El agua saldrá lentamente de la botella y regará las plantas cuando usted no esté.